Hermana de Édgar Manuel Casillas González, desaparecido el 7 de julio de 2013 en Tesistán, Jalisco. Hasta su desaparición era médico de la sierra wixárica, tenía cerca de 300 pacientes.
“Mi nombre es Amanda Aída González Casillas y busco a mi hermano Edgar Manuel Casillas González, él desapareció el 7 de julio de 2013 en Tesistán, municipio de Zapopan, Jalisco, y hasta ahorita pues no sabemos nada de él. Sí se puso inmediatamente la denuncia en fiscalía porque como él es médico, pensamos que se lo había llevado un grupo delictivo y para que, en caso de que él cayera o detuvieran a ese grupo delictivo y él estaba dentro de ese grupo, no lo consignaran igual que los demás delincuentes, por eso se puso la denuncia, pero pues, no hemos sabido nada. Detuvieron a algunas personas en diciembre de 2013 y según uno de ellos, él lo sepultó, pero cuando abrieron una fosa que estaba ahí en Santa Lucía, no se encontró su cuerpo, ropa, nada, nada de él. Pero pues hasta la fecha no sabemos nada. Él es doctor, muy buen doctor, estuvo en la sierra con los Wixárikos (sic), allá dando su consulta y era doctor tanto de humanos como de animales. Y entonces pues era muy conocido, ¿no?, allá. Era muy conocido y pues todos le, pues lo querían, lo admiraban mucho.
Pero en fiscalía no se han visto avances, yo veo que no, no les están buscando, pues.
No están buscando ni siquiera a los delincuentes porque, hace casi como un año, cuando vino la Comisión Nacional de Búsqueda, dijeron que había una orden de aprehensión para uno de ellos y hasta ahorita, creo que fue en febrero, creo que sí fue en febrero cuando vino y hasta ahorita no la han ejecutado esa orden de aprehensión. O sea, ya pasaron meses. No hacen nada en la Fiscalía y nosotras con nuestros medios investigamos la desaparición. Nos hemos metido en cada problema, entonces nos hemos contactado con personas que están dentro de la delincuencia para saber de nuestros familiares, arriesgando nuestra propia integridad y la de nuestra familia, que la verdad que hubo una persona que, pues yo creo que le caí bien y me dijo: “Ya no te metas, ya no te metas en andar buscando a tú hermano porque pues, ¿quieres que corra tu familia o alguno de tus familiares el mismo riesgo?”. Pero pues yo lo sigo buscando y espero encontrarlo vivo. Porque se supone que, entre los muertos ahí está SEMEFO y ahí está disque fiscalía para buscarlo, ¿verdad? Es su deber de ellos buscarlo, pero yo lo sigo buscando vivo.
Es una lástima que nuestra fiscalía no sirva. Y sí, también yo le di a Mariana (García Sosa), le di muestras de mi hermano de unas muelas que yo tenía porque él se sacó las muelas del juicio y yo las tenía. Y le dije que sí podían sacarle el ADN. Se las mostré y me dijo: “Sí, claro que sí se puede”. Entregué la muela de mi hermano con la esperanza de que diera positivo en algún lugar, en algún SEMEFO, pues. Que me entregaran el ADN y buscarlo yo en otros estados. Pero aun así, no nos hemos detenido porque pues, hemos ido a otros estados a sacar, a dar muestra de ADN. He llevado a mi madre, mi madre tiene 70 años y la muevo pues, con mis medios para poder buscarlo en los SEMEFOS de otros estados.
Siento como una mentada de madre por parte de ellos (ADN México), que hayan venido a burlarse de nosotras. Y pues más de mí porque pues yo confié en que realmente iban a sacar el estudio y me iban a regresar los resultados. Y pues, la verdad es que sí me da mucho coraje que se hayan burlado. Me siento que no quisiera ni verla (a Mariana García Sosa) porque entonces sí le voy a brincar.
(Me dijo (García Sosa): “Sí, sí efectivamente sí se puede sacar el ADN”. La metió en un sobre, sellado con nombre y todo. La muela era grande y tenía todavía sangre; estaba seca pero todavía la tenía, era una muela grande. Dijo: “La vamos a examinar, la vamos a abrir, vamos a sacarle el ADN y pues, ya no va a haber muela”. Yo dije: “Está bien, yo quiero los resultados”.
Pero pues, ni muela, ni resultados. No me regresó nada. Ni las muelas ni resultado de ADN. Pues lástima, ¿verdad? Que me hicieron perdediza la única muestra de, que tenía para estar más segura del ADN de mi hermano. Una muela nada más, era la única que había guardado él. Y porque, pues ahí lo tenía de su colección. Y porque dentro de todo porque era muy detallista él y pues tiene muchas cosas. Y yo esculcándole y encontré su muela.
No es mi intención encontrarlo muerto. No, me niego… Pero pues, nosé, la verdad, pensé, si él está muerto, espero con esto encontrarlo pero, nada, no hay nada. Triste.
Con Mariana lo que nos dio confianza fue que nos dijo que había –con otra compañera–un positivo en Puebla. Que era el 80% de seguridad que fuera el hijo de esta compañera, de Verónica, y eso nos dio más confianza. Pero cuando nos tomaron el ADN y no vimos resultados, también nos dio desilusión y desconfianza con ella.
En ese momento tú sientes desilusión, coraje, impotencia y pues una bola de sentimientos que no puedes. Y duran días y tú sigues con eso, con esos sentimientos”.
*Fragmento de la entrevista completa.
